La ciudad de Málaga hace honor a su nombre como capital de la Costa del Sol. A su variada vida cultural, su ambiente relajado y sus paseos por la playa los acompaña siempre un clima envidiable. Es raro que haga mal tiempo, por lo que supone un destino perfecto para ver muchas cosas y pasar un día emocionante. Esta urbe fue testigo del nacimiento de Pablo Picasso y su espíritu está presente en muchos de los espacios de la ciudad, que le rinden homenaje. No olvides que es una de las ciudades mejor conectadas de toda Andalucía. El aeropuerto de Málaga recibe numerosos vuelos nacionales e internacionales, mientras que el AVE te permite llegar desde Madrid en 2 horas y media. La red de autopistas y autovías interurbanas es también excelente, por lo que otra buena alternativa es alquilar un coche desde Málaga.
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La Alcazaba
Esta magnífica construcción es una de las más queridas de Málaga, además de ser un ejemplo extraordinario de fortificación palaciega musulmana. Se levantó entre los siglos XI y XV en el monte de Gibralfaro y estaba destinada a ser la residencia de los gobernantes. Consiguió su fama de inexpugnable durante el asedio de los Reyes Católicos en 1487. Se mantuvo en un buen estado de conservación hasta sufrir graves deterioros con el terremoto de 1680 y otros ataques. Finalmente, en el siglo XX comienzan las labores de restauración y el complejo se declara Patrimonio Histórico de España. Hoy en día puedes recorrer la Plaza de Armas, el Palacio, la Puerta de los Siete Arcos o la Torre del Homenaje. Cuando termines tu visita, puedes detenerte en el Teatro Romano que hay junto a la Alcazaba, el mejor conjunto arqueológico de toda la ciudad.
Distancias desde la estación de Málaga hasta la Alcazaba.
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La calle Larios
Los aficionados al shopping no podrán evitar detenerse en cada escaparate de la emblemática calle Larios. Se trata de una vía peatonal que discurre entre elegantes tiendas y un ambiente de lo más animado. Aunque solo tenga 350 metros de longitud, le sobran para ser la principal arteria comercial de Málaga, por lo que te proponemos reservar un rato en tu día para ver tranquilamente sus tiendas y boutiques. La calle Larios comienza en la Plaza de la Constitución y llega hasta el Parque de la Alameda Principal, muy cerca del mar. Los edificios simétricos de esquinas curvadas son una de sus señas de identidad, obra de Eduardo Strachan. Se encuentra entre las calles más caras de Europa y siempre que la ocasión lo permite, se viste de fiesta. Navidad, el Festival de Cine de Málaga, la Feria o la Semana Santa son citas clave para engalanar la calle Larios.
Distancias desde la Alcazaba hasta la calle Larios.
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La catedral de Málaga
A la catedral de esta urbe se la conoce popularmente como “La Manquita”, ya que su torre sur se quedó sin edificar, y es otro de los lugares imprescindibles que recomendamos ver en Málaga en un día. Por petición expresa de los Reyes Católicos, se comenzó a levantar en el siglo XVI sobre la antigua mezquita árabe. A pesar de no estar terminada del todo, no es motivo suficiente para restarle belleza. Se trata de una joya del Renacimiento y fue Diego de Siloé quien dio los primeros pasos en su construcción. El resultado es un templo realmente imponente y lleno de grandeza. Admira detenidamente la fachada principal y contempla los distintos juegos de luces en sus soluciones arquitectónicas. Una vez en el interior, la capilla mayor es el espacio esencial donde se venera a la Virgen de la Encarnación.
Distancias desde la calle Larios hasta la catedral de Málaga.
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El Museo Picasso
En la actualidad, la oferta museística de Málaga es realmente impresionante: el Museo Carmen Thyssen, la sede del Museo Ruso de San Petersburgo o la del Centro Pompidou están entre los más visitados. Sin embargo, si solo puedes ver uno durante tu día en la ciudad, te aconsejamos que acudas al Museo Picasso, situado en el precioso Palacio de Buenavista. Son varios los museos que se pueden encontrar en la geografía española dedicados al genio cubista, pero este tiene un significado muy especial. Málaga fue la ciudad natal del artista y aquí dio sus primeros pasos. Por ello, el Museo Picasso de Málaga plantea un recorrido para comprender la evolución artística de este pintor único. Contemplarás sus trabajos más tempranos, cuadros pertenecientes a los períodos azul y rosa, así como obras donde ya se ha rendido por completo al movimiento cubista. Pintura, grabado, escultura y hasta cerámica completan esta soberbia colección que te acercará un poco más a la figura de Picasso. A la salida del museo puedes aprovechar para tomar algo en la Taberna El Pimpi, una de las más famosas de la ciudad donde degustar una buena fritura de pescado.
Distancias desde la catedral hasta el Museo Picasso.
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Playa de la Malagueta
No puedes pasar por Málaga sin caminar por la Malagueta, la playa urbana más céntrica de la ciudad. Gracias a su excelente localización se ha convertido en uno de sus mayores atractivos, con más de un kilómetro de longitud. Entre sus principales reclamos se encuentran los chiringuitos de la playa, perfectos para una deliciosa ración de pescaíto frito. Aprovecha para probar los auténticos espetos de sardinas, que se hacen directamente al calor de las brasas pinchados sobre la arena. El olor ahumado de este plato estrella te conquistará por completo. Ya que estas en esta zona, aprovecha para pasear por el barrio de la Malagueta y descubre la Plaza de Toros, el Palacio de la Tinta o el Hospital Noble de Málaga.
Distancias desde el Museo Picasso hasta la playa de la Malagueta.
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Jardín Botánico de Málaga
Si aun te queda algo de tiempo en tu intenso día en Málaga, puedes acercarte hasta el Jardín Botánico, un rincón donde podrás ver un verdadero paraíso tropical. Se creó a mediados del siglo XIX con el nombre de Jardín de La Concepción, como un espacio verde de recreo para los marqueses de la Casa Loring. Hoy en día, este lugar se ha convertido en un conjunto de jardines que albergan más de 50.000 plantas de miles de especies diferentes. Además, aquí también se exponen restos de las colecciones arqueológicas que tenían los marqueses, exhibidos en el conocido como Museo Loringiano. Piérdete en este oasis natural que se halla a tan solo 5 kilómetros del centro de Málaga. Podrás llegar en coche por la A-45 en pocos minutos, así como tomar el autobús de la línea 2 hasta la última parada.
Distancias desde el aeropuerto de Málaga hasta el Jardín Botánico.