Además de disfrutar de la cosmopolita y encantadora ciudad condal, te proponemos aprovechar las bondades de la región y realizar diferentes excursiones de un día desde Barcelona, donde puedes alquilar un coche si es que no cuentas con uno propio. Bien comunicada con el resto de Cataluña por diferentes carreteras y autopistas, en menos de una hora en coche podrás descubrir lugares únicos en la Costa Brava, explorar las zonas rurales del interior o conocer pequeños pueblos repletos de historia y tranquilidad. Carga el maletero y prepárate para recorrer la maravillosa provincia de Barcelona y otras zonas de Cataluña.
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Las montañas de Montserrat, un paraíso rural
El macizo de Montserrat es un lugar único y se puede llegar fácilmente desde el centro de la ciudad de Barcelona. Ubicado en la Cordillera Precostera, destaca por sus piedras redondeadas y, sobre todo, por su conocido Monasterio de Montserrat, incrustado entre las rocas. En esta excursión, además de disfrutar de esta abadía benedictina, en la que se encuentra la imagen de La Moreneta, la Virgen de Montserrat, también puedes aprovechar para realizar rutas de senderismo y escalada en sus formaciones rocosas. Para llegar apenas tienes que conducir 50 minutos tomando la salida de la AP7 desde Barcelona.
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Aprovecha la oferta de ocio de Sitges
Por su cercanía con Barcelona, a solo 40 kilómetros al sur, Sitges es uno de los destinos preferidos para realizar excursiones de un día. Además, es una ciudad que reúne muchos atractivos turísticos, desde sus calas y playas hasta sus casas coloniales. Incluso recibe el Festival de Cine Fantástico, uno de los eventos culturales más importantes de la comunidad. Si viajas con ganas de fiesta, Sitges es también un destino idóneo, ya que sus discotecas son reconocidas como unas de las más animadas de la provincia. Antes de regresar a Barcelona debes visitar la iglesia de San Bartolomé y Santa Tecla o el Museo Cau Ferrat.
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Bañarte en las aguas cristalinas de la Costa Brava
Gracias a su cercanía, Barcelona puede ser un buen punto de partida para visitar la Costa Brava. Por eso, te recomendamos recorrer la costa parando en diferentes pueblos y calas para descubrir los encantos de la zona. Por ejemplo, puedes ir hasta Cadaqués, a 170 kilómetros de Barcelona y uno de los pueblos más bonitos de España, y desde allí regresar disfrutando de playas como Illa Roja, Platja Honda y Aiguablava (Begur), Cala Sa Boadella y Sa Caleta (Lloret de Mar) o Cala Pola (Tossa de Mar).
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Penedés, un lugar ideal para probar un vino catalán
En la provincia de Barcelona se encuentra El Penedés, una comarca histórica conocida por su tradición vinícola. El Penedés tiene denominación de origen propia y se caracteriza por la diversidad de sus vinos debido a la diferente geografía, abarcando desde el interior hasta la costa. Y si te gusta el cava, estás de suerte, ya que los dos productores más conocidos del mundo, Codorniu y Freixenet, se encuentran en esta zona. Puedes disfrutar de un tour por diferentes bodegas de este territorio, a solo 50 kilómetros de Barcelona.
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Descubre las atracciones de Tarragona
Conduciendo en dirección sur desde Barcelona encontrarás la provincia de Tarragona, un lugar que cuenta con numerosos municipios turísticos como Salou o Cambrils, conocidos también por los jóvenes por sus abundantes discotecas. Además, si visitas Barcelona en familia, también es una buena opción, ya que allí se encuentra Port Aventura y otros parques de atracciones ideales para hacer una excursión de un día. La forma más rápida de llegar es conducir por la carretera costera C-32 hasta San Vicente de Calders y allí tomar la autopista AP7 hasta Salou, en un recorrido de poco más de una hora.
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Visitar Girona, una ciudad medieval para enamorarte
A 100 kilómetros al norte de Barcelona se encuentra Girona, capital de la provincia del mismo nombre y una de las ciudades más bonitas de la región. Merece la pena visitarla para perderse a pie entre las calles empedradas de su centro histórico, disfrutando de los edificios y monumentos que irás encontrando a tu paso como la catedral, el monasterio de Sant Pere de Galligants o la muralla. Si prefieres quedarte unos días y disfrutar de la ciudad, puedes devolver tu coche de alquiler en Girona.